Las fiestas más destacadas de Alicante son:
Los moros y cristianos llegan a Villafranqueza en marzo, cuando se monta el castillo, se encienden las luces y se lee el pregón. Bailes, paellas, tracas y repiques de campanas, cenas, dianas, pasacalles, disparos de arcabucería, juegos, procesiones, ofrenda de flores, "mascletas" y fuegos artificiales conforman un repleto programa de actos festivos.
El paso de la Santa Cena es el mayor de España, mientras que Salzillo o Bussi son algunos de los autores del casi medio centenar de imágenes que del domingo de Ramos al domingo de Resurección recorren la capital alicantina.
El barrio de Santa Cruz se viste de gala y exhibe, en muchas de sus esquinas, las tradicionales cruces de flor. La música y la pólvora también tienen cabida en estas fiestas en las que también se programan actos específicos para los más pequeños.
Alicante vive, con la llegada del solsticio de verano, una auténtica fiesta. El color, la pólvora y el fuego son los ejes de una celebración en la que la música lo inunda todo. Pese a que son unos días repletos de actos destacables, cabe destacar la ofrenda de flores a la Virgen del Remedio, los concursos de "mascletàs", los pasacalles, la feria taurina y, como no, los artísticos e inigualables monumentos de cartón y madera que, sin remedio, arderán la noche del 24.